Pasenado por la ciudad

Había salido de compras sola, y al final no me había comprado nada porque no me gustaba el estilo que se llevaba ahora... todo muy pijo. El transito peatonal era bastante. Giré una esquina...

Choqué contra alguien...
-¿Qué coño haces, tía?-Pregunté a la chica que había chocado contra mí. Apreté los puños para que el fuego no se apoderara de mí. Algunos de mis colegas que iban conmigo rieron por lo bajo, pero pararon al fulminarles con la mirada.

-Ay...
Y miré al chico con el que me había chocado...
-Lo siento... no iba mirando por donde iba.-Me apresuré a decir.

La fulminé con la mirada. ¿Qué pretendía?
-¿Te estás riendo de mí?-Le pregunté, acercándome a ella, entornando los ojos con odio.

Le miré sin llegar a entender qué pretendía, y deseé poder volverme invisible y alejarme... pero no era oportuno rodeada de tanta gente.
-No...
Había contestado sin darme cuenta.

Sentí como la llama se encendía en mi interior.
-Te la estás jugando, guapa...-Dije, acercándome a ella otra vez. Mis colegas rieron de nuevo.-Queréis dejar de reiros, capuyos.-Les grité, y mos ojos chispearon.-Largaos, no quiero ni veros...
-Pero...
-¿Me replicas?
-No, no...
Y se alejaron, me volví de nuevo a la chica.
-La próxima vez mira por donde vas, joder.-La recriminé, mirandola mal.

Sus amigos se alejaron mirandonos mal.
-S-si... lo siento...
Y le miré, era bastante guapo...

Me fijé en que mi miraba, y le devolví una mirada dura.
-¿Qué coño miras ahora?-Le pregunté de mala gana.- ¿Tengo monos en la puta cara?

-N-nada...
Y deseé de nuevo hacerme invisible.

-Ay... que cruz.-Dije suspirando, y empecé a caminar dándole la espalda.-Pues ale, hasta luego.

-Espera!
Y corrí tras él cogiéndole de la chaqueta.

Noté como me agarraba y me giré bruscamente.
-¿Qué quieres ahora?-Pregunté algo borde, pensada...

Le miré, algo sonrojada.
-Este... no me has dicho tu nombre...
Muy bien, ni si quiera se lo había preguntado, volví a sonrojarme... vaya estúpida.

-¿Y para qué quieres mi nombre?-Pregunté alaznado una ceja.

Le mire largo rato.
-Yo... este... me llamo Alice...
Me mordi la lengua, tonta, tonta, tonta, no puedes ir dando tu nombre por ahí...
-¿Y tú?

Reí.
-¿Tanto te interesa saberlo?-Pregunté, y seguí caminando.

Camine hacia el.
-Tú sabes el mío... ahora yo tengo derecho a que me des el tuyo.
Y me pare frente a el, cortandole el paso.

Su insistencia me molestaba.
-Mira tía, tengo cosas que hacer, así que aparta de mi camino y lárgate.-Contesté a malos modos, empezando a arder un poco por dentro.

Quise apartarme, pero no pude.
-No hasta que me digas tu nombres... ¿tan dificil es?
Y me cruce de brazos, mirandole.

-¿Qué coño te pica ahora?-Pregunté.-No me hagas tener que apartarte por las malas... puedo ser muy bruto, y que seas un chica me la trae floja.-Y mis ojos llamearon.

Le mire y dude un momento,... pero negue con la cabeza, no pensaba apartarme hasta que me dijera su nombre.
-Pues enseñame esas malas maneras...
Dije, con algo de duda.

La observé, y no pude evitar sonreír, me acerqué a ella, hasta tener mi cara frente a la suya, oía su respiración de muy cerca.
-¿De verdad quieres ver mi malas formas?-Pregunté, acariciandole una mejilla con mi mano.

Me perdi en sus grandes ojos... y asenti tragando saliba. Note su mano cálida en la mejilla y cerré los ojos.
-Adelante...

Volví a sonreír.
-¿Qué se supone que estás haciendo?-Le preguntó, mirandola divertido.- ¿Te vas ha dejar a un desconocido al que no conocs de nada?-Y alcé las cejas.-Podría ser peligroso...

-Si... pero me da igual...
Contesté, sin saber muy bien lo que hacía.