De Compras

Ya hemos llegado-Entramos en una tienda que parecía antigua pero estaba llena de ropa de moda. Tenía todos los estilos posibles-Bienvenida a los almaces marginales.

Entré tras ella y me quedé mirando la ropa, me gustaba.
-Me gusta más que esas otras tiendas a las que hemos ido.
Dije, acercandome a un perchero donde había chaquetas.
-Ves, son más baratas y más chulas que en el otro sitio.
Dije.
-Nos querían timar.

A eso, se le llama capitalismo-Dije divertida por su reacción- No hay mayores villanos que los economistas.
Miro un vestido que está rasgado en varias partes. Me gusta.

-Sí, Feliz Capitalismo señoras y señores.
Comenté,sacando la chaqueta del perchero.
-Pues me la voy a llevar.. hasta muy bien de precio.
Saqué la chaqueta, que era negra con calaberas rojas.

Me reí por su comentario. Y me compré también el vestido que había mirado. La dependiente me mira y me da una carta, me quedo descifrándola un rato y sonrió.
-Por fin me voy de esta ciudad.

La miró.
-Me alegro ^^, ¿puedo preguntar a dónde irás?
Pregunté, con curiosidad. Me había caído bien la chica.

Vuelvo a Alemania, me han propuesto matrimonio-Dije riéndome de lo extraño que sonaba-Nunca me ha gustado esta ciudad.

Me asombro ante la noticia.
-Enhorabuena!
La felicitó.
-¿No eres muy joven para casarte? Mira que luego hay divorcios por el tema de que se casaron muy jóvenes.
Comento, llevando la chaqueta al mostrador para pagarla.

-Gracias. No , no soy tan jóven como piensas-Digo divertida. Además este chico lo conozco de toda la vida.

Sonrío.
-Pues me alegro, ojalá yo tenga tanta suerte a la hora de casarme.
Comento, pago la chaqueta.
-¿Quieres que vayamos aalgún otro sitio?

No, podemos ir donde quieras. No tengo prisa-Digo con tranquilidad sacándome un cigarrillo ¿quieres?

-No gracias, no fumo.
Contesté, sonriendo.
-Pues no sé... ¿te apetece que vayamos a comer algo? Me esta entradno un poco el hambre.

Asiento tranquilamente-Me parece bien, yo creo que me tomaré un café. Comer no es mi punto fuerte.

-¿Conoces algún buen sitio por aquí?
Pregunté, saliendo de la tienda.

Sí, hay una cafetería restaurante bien de precio y con buena gente-Comenté- Te guio si quieres.

-Claro ^^
Dije con una sonrisa.
-Me siento mal teniendote de guía... no tendrás nada que hacer, no?
Pregunté, con algo de culpa.

Sonreí. Qué chica tan simpática-No, no tengo nada que hacer. Además es más divertido salir que cumplir con las obligaciones.

-Genial ^^
Me había caído genial.
-Pues tú dirás por donde es.

Giré por las callejuelas y saludé a alguna gente. Adoraba a los vagabundos, sabían mucho de la vida, más que una persona que hubiera vivido siempre. Por fin, llegamos a una cafetería que aunque su fachada estaba algo ruinosa, por dentro merecía la pena- Aquí es donde hace el mejor café de la ciudad.

-Pues vamos a probarlo ^^
Dije con ganas.
Entré tras ella, por fuera dejaba mucho que desear, pero por dentro estaba bien. Era cierto eso de no juzgar un libro por su portada.

La mitad de la población detesta estos barrios, pero aquí vive la gente más honrada y trabajadora, si me dejaran darle dinero a alguien. Ten por seguro que remodelaría este barrio- Una camarera se acercó para tomar nota.
-¿Qué quieres?-Pregunté a Alice.

Asentí lo que dijo, yo vivía en un barrio medio.
-Qué me recomiendas?
Pregunté, sin saber que pedir.

Café caliente con nata. Está bastante bueno-Pedí eso para ella y para mí un café muy amargo. Era como más me gustaba
Si quieres algo de comer dímelo y se lo pido a la camarera después.

-Quizá más tarde.
Contesté.
-Hace mucho que conoces esta cafetería?
Pregunté, observando de nuevo el local.

-Un año-Respondí-Tuve que venir a vivir a Nueva York cuando recibí la herencia de mi madre. Al principio creí que este barrio daría problemas, pero es muy tranquilo.
-Y tú, ¿hace mucho que vives en Nueva York?